Con el tiempo nos hemos acostumbrado a no desperdiciar comida y a crear unos hogares más sostenibles. Esta práctica es muy positiva para la economía y la limpieza del hogar. Si te identificas con esto y en tu cocina tienes un pan duro, no lo desperdicies y tires a la basura. Aún lo puedes rescatar con otras recetas.
Afortunadamente, el pan es un alimento muy versátil en la mesa. Va muy bien en el desayuno, almuerzo, cena e incluso como postre.
Por tanto, te mostramos algunas ideas para no desaprovechar el pan duro en casa. Toma nota sobre las diferentes opciones que tienes.
¿Qué hacer con el pan duro?
Pan molido
Este es un clásico, pero siempre nos saca de apuros. Solo necesitas un rallador de pan y coger el pan duro.
Así puede ser muy útil para empanizar unas milanesas de pollo o res. También cualquier tipo de carnes o verduras. Lo ideal es que lo conserves en un lugar seco y fresco. ¡Te puede durar por varios meses!
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Budín de pan
Si eres creativa en la cocina y te apasionan los postres, puedes realizar un budín de pan duro. Esta opción es increíble para comer como desayuno o postre. También puedes agregar frutas frescas y leche condensada.
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Tostadas francesas
Esta receta es ideal para un desayuno delicioso, extravagante y francés. Con el pan duro tendrás un efecto mucho más saciante que solo con las rebanadas de pan de caja.
Al pan duro agrégale canela en polvo, vainilla, frutos rojos y miel. ¡Queda espectacular!
Crutones para ensalada o sopas
Esta opción es muy práctica, en especial, si normalmente comes muy saludable. Los crutones no solo acompañan las ensaladas, también van muy bien con las sopas.
Corta en cubos el pan duro y colócalos sobre una charola. Barniza con un poco de aceite de oliva y las especias que más te gusten. Por ejemplo, la mezcla entre romero y tomillo es muy buena.
Hornea durante algunos minutos hasta que se vea estén dorados y ¡listo! Así de fácil puedes hacerlos sin necesidad de gastar dinero.