Una manera práctica de incluir las frutas en tu alimentación saludable es a través de recetas deliciosas. En este caso, te contamos el paso a paso de la preparación de una compota de pera. La puedes consumir en las mañanas como desayuno o en las tardes como merienda.
La pera es uno de los alimentos más cruciales de nuestro balance nutricional, puesto que debido a sus propiedades fomenta el buen estado de salud. En cuanto a la cocina, es un alimento muy versátil que puede ser esencial para las recetas más refrescantes.
Esta compota también puede ser ideal para los más pequeños. Debido a su textura suave es muy amigable con cualquier organismo delicado. Además, su delicioso sabor siempre los dejará con antojos de más.
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Propiedades de la compota de pera
La pera es una de las frutas más fáciles de digerir. Aquí algunas de sus propiedades que pueden beneficiar tu cuerpo.
- Tiene antocianinas: está comprobado que el consumo de esta propiedad reduce el riesgo de diabetes tipo 2.
- Contiene fibra, potasio y antioxidantes: esto ayuda a prevenir problemas cardiovasculares como hipertensión, problemas de colesterol, inflamación y rigidez del tejido cardíaco.
- Aporta bajas calorías: cada pera contiene 100 calorías por unidad, es decir, el 5% del consumo diario recomendado por especialistas.
- El 80% de su contenido es agua: esto quiere decir que la pera es una fruta que favorece la hidratación y fortalece la función de los riñones a eliminar toxinas del organismo. Además, previene problemas gastrointestinales.
- Es antiinflamatorio: la pera contiene cobre y vitaminas C y K, por consiguiente, previene la inflamación en el cuerpo.
¿Estás lista para preparar una deliciosa compota de pera?
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Compota de pera
Ingredientes
- ½ kilo de peras
- 25 gramos de azúcar
- 1 cáscara de limón
- Canela
Instrucciones
Para comenzar, debes pelar las peras quitándole el corazón y las pepitas. Córtalas en trozos pequeños y colócalos en una olla para su cocción. En esa misma, agrega la cáscara de un limón, un par de cucharadas de agua, azúcar y canela.
Tapa la olla e inicia la cocción a fuego suave-medio. Cocina hasta que la pera se ablande. Luego, retira la cáscara de limón.
Después de unos minutos, comienza a aplastar la mezcla con una cuchara de madera. Ve probando y corrigiendo con azúcar si se encuentra muy ácida.
Si crees que el resultado quedó muy líquido, puedes dejarlo un rato más para que el agua se evapore y logres la consistencia adecuada. De igual manera, si quedó muy sólida, le puedes agregar un poco de agua.
Reparte la compota en un recipiente y mantenla fría en la nevera. Antes de consumir, puedes agregar otro toque de canela sobre la superficie.