Esta receta de galletas sin gluten es única porque no debes agregarle huevos. Es un postre muy saludable para tu organismo. En especial para aquellas personas que no reciben bien esta proteína presente en algunos cereales.
Además, te aportará una alta sensación de saciedad durante la merienda y te calmará esos inevitables antojos de dulce.
La preparación que te explicamos a continuación es la base para muchas otras recetas que quieras personalizar. Puedes agregarle algunas ralladuras de limón o naranja. Tal vez frutos secos o chips de chocolate. También especias como canela o jengibre. ¡Tú eliges! Esta receta es tuya también.
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Recomendaciones para preparar las galletas sin gluten
Para lograr el éxito con estas galletas sin gluten es importante mantener una mantequilla de calidad. Es preferible que sea salada para que no tengas que añadir ese ingrediente.
Si está muy fría la mantequilla, puedes ponerla un rato en el horno (precalentado a 175°C con calor arriba y abajo) y ablandarla. Este truco te ahorrará mucho tiempo. Revisa bien que la mantequilla no quede por completo fundida.
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También es recomendable utilizar harina de almendra porque es la opción más saludable y te aportará mucha más saciedad.
Puedes acompañar las galletas sin gluten con una taza de café o té. Si lo prefieres, un vaso de leche también es una bebida exquisita para mojar el postre. O tal vez utilizarlo como base para un mousse de chocolate que prepares en casa.
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Galletas sin gluten
Ingredientes
- 100 gramos de almendra molida
- 45 gramos de mantequilla con sal
- 20 gramos de azúcar glasé
Instrucciones
Para empezar precalienta el horno a 175°C con calor arriba y abajo. Prepara también una bandeja con papel mantequilla para hornear.
Tal y como lo describimos anteriormente, agrega la mantequilla blanda en un recipiente hondo. Bátelo con la almendra molida y el azúcar glasé. Utiliza un batidor (preferiblemente eléctrico) hasta conseguir una crema homogénea. Termina de cremar con una espátula o cuchara.
Posteriormente, toma pequeñas porciones de la masa y forma bolitas con las manos. Las porciones deben ser más reducidas que una nuez.
Repartelas en la bandeja de manera que queden separadas. Y aplástalas con un tenedor humedecido para formar discos redondos.
Hornéalas entre 8 y 10 minutos a medio altura para lograr un dorado espectacular. Retíralas del horno y déjalas enfriar sobre la bandeja unos 5-10 minutos.