Nada como pasar la tarde con un panna cotta que tiene la magia de un flan con un poco de leche. Su textura gelatinosa hace que al momento de sumergir la cuchara sea un verdadero placer.
Se cree que este postre proviene de la región de las Langhe, al sureste de Turín, a principios del siglo XIX. En ese entonces había un excedente de leche y una mujer de origen húngaro quiso aprovecharla creando esta receta.
Este postre, de igual manera, se realizaba en la Edad Media en el Valle Aota. Antes las recetas no incluían gelatina, por tanto, utilizaba una técnica hirviendo las espinas del pescado para extraer el colágeno y convertirlo en gelatina. También, en otras ocasiones, usaban claras de huevo para darle firmeza.
Panna cotta: una receta para bañar en salsa o servir solo
Con el paso del tiempo este postre ha variado sus ingredientes y actualmente utiliza la nata, la leche, el azúcar y la gelatina. Es un postre tan excelente que ha trascendido fronteras y es muy apreciado por todo el mundo.
Puedes encontrar otras versiones como la bavaroise suiza que se realiza a partir de gelatina, crema inglesa y nata montada.
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¿Cuánto tarda en hacerse un panna cotta?
Su nombre traducido del italiano significa “nata cocida”. No obstante, no necesitas de un gran esfuerzo para prepararla. Simplemente, la leche y la nata se cocinan por un tiempo muy breve junto al azúcar y la vainilla. Luego, se le añade el agente espesante que entrega la textura gelatinosa que adquiere firmeza al enfriarse.
Así que, en general, es muy sencillo de hacer y no necesitas mucho tiempo para prepararlo. Lo único importante es crearlo con tiempo de antelación para que tengas suficiente minutos de enfriarse.
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Ahora bien, otro aspecto importante es la salsa de fruta (fresas, moras, frambuesas) o compotas (pera, melocotones, albaricoques). También puedes incluir dulce de leche o arequipe, salsa de chocolate, caramelo, coco, entre otros. Para acompañar tus recetas dulces puedes dejar volar tu imaginación y ser creativa.
Normalmente, el panna cotta se sirve frío y en vasitos individuales. Lo más recomendable es comerla recién hecha para que no se pierda su frescura.
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Ingredientes
- 2 sobres de gelatina sin sabor
- 1 ½ taza de leche + ½ taza de leche
- 4 tazas de crema de leche o nata liquida
- ½ taza de azúcar
- 1-2 cucharaditas de esencia de vainilla
- Fresas o frutillas frescas
- Salsa de fresas
- Dulce de leche o arequipe
- Salsa de chocolate
Instrucciones
- Pon la ½ taza de leche en un tazón pequeño y espolvorea la gelatina sobre ella para que se ablande.
- Luego, en una olla mediana, calienta la crema de leche y el resto de la leche con el azúcar. Mezcla bien para que el azúcar se disuelva y cocine hasta que empiece a hervir.
- Retira del fuego y agrega la esencia de vainilla.
- Incorpora la mezcla de leche con gelatina a la mezcla caliente de crema y revuelve bien.
- Para lograr que la panna cotta quede bien cremosa y suave puede pasar la mezcla por un colador. Así eliminarás cualquier grumo.
- Vierte la mezcla de panna cotta en moldes o copas de acuerdo a tu preferencia.
- Deja enfriar y luego refrigera por mínimo 4 horas antes de servir.
- Sirve directamente en las copas o retira la panna cotta de los moldes antes de servir. Sirve adornada con fruta fresca, salsa de frutas, dulce de leche o salsa de chocolate.