¿Conoces la pavlova? Quizás no de nombre pero seguramente la has visto en redes sociales porque se está posicionando como uno de los postres del momento y es que ya no es suficiente con adquirir una porción para merendar, ahora muchos agregan este postre dentro de su lista de deseos para celebrar en su cumpleaños. Si has tenido la oportunidad de saborear esta especie de torta peculiar, sabes lo importante que se vuelve contar con la receta y, por el contrario, si jamás la has probado, aquí tienes todo lo que necesitas saber para preparar una pavlova casera desde el confort de la casa.
Puede que actualmente no te apetezca estar saliendo por temas de salud y cuidado familiar pero… ¿Qué te impide conseguir todos los ingredientes para hacer una pavlova casera? ¡Nada! Pues incluso, si no tienes para nada ganas de salir, puedes buscar en tu teléfono algún supermercado moderno que tenga compra en línea y pedir un delivery para que te acerquen hasta el hogar todo lo necesario.
Te puede interesar: Bananas congeladas cubiertas de chocolate: date un gusto con este snack ideal para días de calor
Así que si realmente mueres de ganas por probar una pavlova ya sabes que no tienes excusa. Aunque si deseas volver a tener esa delicia en tu boca, seguramente el mismo recuerdo te dará el impulso para ponerte manos a la obra. En realidad se trata de un postre que no tiene desperdicio.
Ver esta publicación en Instagram
El encanto de la pavlova
Cuando se habla de una pavlova se hace referencia a un postre crujiente por fuera y cremoso por dentro que está elaborado en capas de merengue, relleno y crema chantilly. Por lo general, la parte de arriba está decorada con frutas que le aportan color y frescura a la receta. Puedes inclinarte por frutos rojos, fresas o frambuesas para darle un toque ácido al dulzor del merengue.
Uno de los detalles más impresionantes de este postre es que se deshace en el paladar ocasionando una explosión de sabores que simplemente nadie debería perderse. El origen de la pavlova es motivo de disputa entre Australia y Nueva Zelanda ya que ambos países piensan que la persona responsable de esta creación gourmet es nacida bajo su territorio.
Lo que sí es un hecho es que el chef que realizó la pavlova se inspiró en la bailarina rusa, Ana Pavlova, y bautizó al postre con el apellido de la artista para homenajearla. De acuerdo con el biógrafo de la bailarina, ellos estaban en la gira mundial de 1926, en Nueva Zelanda, cuando el chef del hotel donde se hospedaban decidió sorprender a la elegante y talentosa mujer con un invento que se volvió popular.
Desde ese momento la famosa bailarina de ballet no solo era conocida por sus actuaciones espectaculares y el glamour que derrochaba en el escenario, pues al ser la inspiración de un postre tan majestuoso, su nombre quedó relacionado con la preparación.
Ver esta publicación en Instagram
Aunque la pavlova se puede consumir en cualquier época del año, su popularidad aumenta en primavera- verano gracias a la frescura de la receta. Sin embargo, es la favorita de muchos para estar presente en fiestas, eventos especiales o días feriados.
¿Qué hace especial a este postre?
¡Todo! La verdad es que está elaborado para ‘probar un pedacito de gloria’ y esto es ratificado por diversos críticos gourmet quienes consideran que esta creación no es más que una obra maestra.
Aunado a ello, su elaboración no es muy complicada y eso la hace aún más atractiva. Esto significa que para tenerla en el hogar no es necesario ser un chef profesional ni un experto en el mundo de la cocina. Otro dato importante es que puedes variar el dulce de leche por ganache de chocolate o Nutella, todo depende de los gustos personales.
El toque delicioso también es gracias a la crema chantilly: aunque puede parecer una exageración, lo cierto es que le agrega un extra súper sabroso. Algo que, sin duda, eleva el postre. Por otro lado, hay que tener presente que cada capa juega un papel fundamental en el resultado final. Del mismo modo, para alcanzar el éxito con la pavlova es necesario que la base del merengue tenga una textura tostadita y crujiente.
El dulce de leche no es necesario que lo prepares, lo puedes comprar ya listo. También puedes irte por el ingrediente que le quieras agregar, como leíste antes, es posible sustituir por chocolate o Nutella. Luego viene el cremoso de crema chantilly y para terminar de rematar se colocan los deliciosas fresas bien frescas y troceadas. No hay una fruta exclusiva, la fresa es la más popular pero puedes agregar kiwi, melocotón o frutos del bosque como arándanos, frambuesas y moras.
Ver esta publicación en Instagram
Datos a considerar:
El punto de la receta más complicado y en donde se debe tener cuidado es al añadir las almendras molidas o la harina de almendras al merengue. Procura hacerlo usando una espátula de goma y con movimientos envolventes para prevenir que el merengue pierda el cuerpo o se baje.
Si es la primera vez que te dedicas a hacer y probar este postre vas a conocer uno de tus nuevos favoritos. ¿Por qué? Debido a que el sabor que ofrece la pavlova es ‘del más allá’. Lo mejor es que si en tu casa sienten el mismo amor por este postre, ya tienes la receta para preparar. Anímate a compartir en familia mientras deleitan el paladar con este rico postre.
Otra opción es dejarla para momentos especiales. Así puedes darle una grata y deliciosa sorpresa a esa amiga que vino para conversar toda la tarde, esa tía que llegó de visita con los primos o simplemente para que tu núcleo familiar explote de amor por ti un día importante. Si tienes niños pequeños, ve el lado positivo: con la pavlova tienes la oportunidad perfecta de mantenerlos tranquilos y ocupados mientras hacen una actividad divertida que requiere prestar atención, acatar órdenes y sonreír.
¿Necesitas más motivos para hacer una pavlova casera?
Te puede interesar: Pasta feta al horno con tomate: esta receta se hizo viral en TikTok y es tan deliciosa como aparenta
Síguenos en nuestras redes sociales
Pavlova casera
Ingredientes
- 125 gramos de almendras molidas o harina de almendras
- 250 gramos de azúcar
- 125 gramos de claras de huevo (4 claras aprox)
- 1 cucharadita de vainilla
- 400 gramos de dulce de leche
- 500 gramos de fresas frescas, grandes y troceadas
- 200 gramos de crema chantilly
Instrucciones
- Precalienta el horno a 140 grados centígrados
- Forra una bandeja para hornear con papel para cocina
- Comienza a mezclar las claras de huevo y el azúcar poniendo ese recipiente sobre otro que tenga agua hirviendo en el fuego de la cocina.
- Mezcla con las varillas hasta que los alimentos se integren por completo.
- Retira del fuego y bate a velocidad media. Al ponerse blanca y espumosa, añade la vainilla y sigue batiendo hasta que el recipiente no esté caliente y puedas formar picos con el merengue al elevar las varillas.
- Quita de la batidora e incorpora al merengue las almendras molidas en dos partes, hazlo siempre con movimientos envolventes hasta conseguir una mezcla homogénea.
- Pon el merengue en la bandeja previamente forrada.
- Hornea durante unos 45 minutos y apaga el horno al culminar el tiempo estimado. Deja que la receta se enfríe ahí durante unos 30 minutos más.
- Cuando esté fría la base, agrega el dulce de leche sobre el merengue horneado, coloca la crema chantilly y decora con los trozos de fresas grandes.
- Mantén refrigerado y sirve.