Dale la bienvenida al fin de semana con un flan de café y leche condensada, ya que al ser frío es el postre perfecto para picar en días de calor.
Además, no empalaga, es lo suficientemente dulce, y contribuye con tu respectiva y más que necesaria dosis de cafeína.
Este flan de café déjalo para ese momento relajante en el sofá mientras ves TV, películas, o lees tu libro favorito. No encontrarás un mejor ambiente en casa para degustarlo, a excepción que tengas visita y compartas el pastel con seres muy queridos.
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Ingredientes opcionales en el flan de café y leche condensada
Esta receta no pasa desapercibida, pues es una verdadera ‘joya’ para los amantes de los dulces y el café. Aparte, hay que rescatar que al cuajar promete una consistencia cremosa, suave e irresistible difícil de ignorar.
Antes de prepararlo échale una mirada a los siguientes ingredientes. El flan de café puedes hacerlo de la manera clásica o agregarle un toque de la cocina moderna para salir de tu zona de confort.
1. Leche evaporada o entera
Por lo general, debes utilizar leche entera, pero si en algún momento no tienes en casa y necesitas salir de apuro, usa la evaporada. Con este producto aseguras buena consistencia, gran sabor, y lo más importante, ¡nadie se dará cuenta del cambio!
2. Café soluble, sin cafeína o instantáneo
Cualquiera de los 3 le queda bien a la receta del flan de café, usa 2 cucharadas si prefieres el aroma más intenso.
3. Azúcar o más leche condensada
No es necesario utilizar azúcar en la mezcla, en su lugar, vierte 400 gramos de leche condensada y con esa cantidad estará bien para endulzar.
No obstante, si quieres replicar la receta de la abuela sin ninguna modificación, entonces utiliza 100 gramos de azúcar y 370 de leche condensada.
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Flan de café y leche condensada
Ingredientes
- 550 ml de leche entera
- 400 gramos de leche condensada
- 2 cucharadas de café instantáneo o sin cafeína
- 6 huevos
Instrucciones
Precalienta el horno a 180 grados.
En un bol mezcla los huevos y la leche condensada con varillas eléctricas, pero procura que el movimiento sea suave.
Cuando estén perfectamente integrados vierte la leche entera y el café.
Bate y coloca la preparación en un molde caliente previamente caramelizado.
Tapa con papel aluminio, transfiere el molde a un envase más grande que tolere calor y añade dos dedos de agua caliente para que esté listo más rápido.
Lleva el flan de café al horno por 1 hora, y pasado el tiempo, chequea con un cuchillo si ya cuajó.
Espera que se enfríe a temperatura ambiente (sin retirar la tapa o el papel que tiene encima).
Después, déjalo en la nevera por 6 horas o toda la noche.
Al día siguiente, desmolda con cuidado dándole la vuelta sobre un plato, y comparte.
