Hay mucho que aclarar en todo lo que se refiere al bizcocho japonés. Para empezar, no tiene la misma consistencia que la torta tradicional, su natural esponjosidad la consigues con claras de huevo, ya que no lleva levadura.
Además, no tiene el mismo sabor que la cheesecake japonés, pues esta receta tampoco necesita crema de leche o nata.
Por otro lado, aunque la apariencia del bizcocho es semejante a simple vista con los pasteles, no se decoran de la misma manera y la textura es distinta.
En conclusión, si no lo has probado, es mejor que lo intentes con esta fácil receta y sabrás que te has perdido de mucho.
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Toppings sugeridos para el bizcocho japonés
Es válido el ganache de chocolate, dulce de leche, frutos rojos o azúcar glass, más de allí son excesos, algo que este postre no requiere.
El bizcocho japonés sobresale por su sencillez, realmente no necesitas tantos ingredientes para resaltarlo. Incluso, por lo general ¡no lleva relleno! al menos no la receta tradicional, la intención es degustarlo sin mayores ‘adornos’.
Por último, si deseas añadir frutos secos a la receta, colócalos solo en la base, dado que en la mezcla no marcará mayor diferencia.
Es perfecto para el desayuno y la merienda
Hay quienes prefieren consumir un trozo de pastel en la mañana, ¿es tu caso? no dudes en elegir el bizcocho japonés. Recuerda que esta receta tiene menos azúcares que el resto, no empalaga, puedes hacerla de vainilla, con sabor a chocolate y dejarla sin topping.
También puedes recurrir a este postre en la hora inédita: justo después del almuerzo, o en su defecto, hornearlo para un día especial.
Acompaña el bizcocho japonés con 1 taza de té o café, ¡y te relajarás en seguida!
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Ingredientes
- 50 gramos de harina de trigo todo uso
- 10 gramos de cacao en polvo
- 3 cucharadas de aceite
- 3 huevos
- 60 gramos de azúcar
- Pizca de sal
- 60 gramos de leche en polvo
Instrucciones
Precalienta el horno 150 grados.
Separa las claras de las yemas y resérvalas en la nevera.
En una olla vierte la leche junto con el aceite y calienta la preparación hasta que esté caliente y no hierva.
Tamiza la harina de trigo y realiza lo mismo con el cacao y la leche en polvo. Después, revuelve los ingredientes hasta que estén bien integrados.
Vierte las yemas de a una, después coloca la sal en las claras, y bate con varillas hasta que estén espumosas y bien montadas.
Agrega el azúcar en tres partes, vuelve a batir con movimientos envolventes de arriba hacia abajo hasta que la masa sea de un solo color.
Transfiere la mezcla al molde sin engrasar, alisa la superficie con un palillo y lleva el bizcocho japonés al horno por 13 minutos. Pasado el tiempo, realiza algunos cortes superficiales en el tope y vuelve a colocar el pastel en calor por 40 minutos más.
Para terminar, coloca el pastel boca abajo y sobre él 2 tazas (así no se hunde). Luego, podrás cortarlo sin problema y disfrutarlo con 1 taza de té o café.