Las costillas de cerdo a la miel son un plato delicioso y popular en muchas culturas culinarias. Este plato combina la textura jugosa y sabrosa de las costillas de cerdo con el dulzor suave y la riqueza de la miel.
La miel no solo añade un sabor dulce, sino que también ayuda a caramelizar las costillas durante el proceso de cocción, dándoles una textura crujiente en el exterior mientras se mantienen tiernas y jugosas por dentro.
La preparación de las costillas de cerdo a la miel implica sazonar la carne con sal y pimienta previamente, para luego ser bañadas con distintos ingredientes con hierbas aromáticas.
Este jugo delicioso que las baña no solo impregna las costillas con un sabor profundo y complejo, sino que también ayuda a ablandar la carne.
Son ideales para una cena familiar
Las costillas de cerdo a la miel son un plato versátil que se puede servir en una variedad de ocasiones. Son perfectas para una cena familiar, una barbacoa de verano, o incluso para un evento festivo. Acompañadas de ensalada fresca, patatas asadas o arroz, las costillas de cerdo a la miel son siempre un éxito garantizado.
Consejo
Con esta misma receta de costillas de cerdo a la miel y siguiendo el mismo procedimiento de elaboración puedes preparar un costillar entero. Puedes cortar antes las costillas para que se impregnen completamente de salsa y así será más fácil controlar el grado de suavidad del asado.
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El método para que las costillas queden suaves, se hace de una manera sencilla: las debes envolver durante la primera parte de la cocción, que será a una intensidad más baja.
Luego, las terminas de cocinar en el horno desenvueltas, a mayor temperatura, para darles ese irresistible tono dorado. Toma nota de cómo debes hacerlo siguiendo las instrucciones de la receta.
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Ingredientes
- 2 kd de costillas de cerdo sin grasa
- 4 cucharadas de miel de romero
- 1 cucharada de salsa de tomate
- Sal
- Pimienta
- Tomillo
- Romero
- 1 cucharada de coñac (opcional)
Instrucciones
- Limpia la grasa de las costillas.
- Agrega sal y pimienta.
- Añade aceite de oliva a un sartén y sella las costillas por ambos lados.
- Colócalas en una bandeja para horno.
- Agrega sobre ellas las hierbas aromáticas, la salsa de tomate y el coñac.
- Llévalas al horno a 200 grados con calor arriba y abajo cubiertas con papel de aluminio durante 30 minutos.
- Cuando haya transcurrido el tiempo añade la miel derretida previamente en el microondas. Baña las costillas y dales vuelta.
- Vuelve a hornear cubiertas con papel de aluminio por 30 minutos más.
- Espera a que las costillas estén bien tiernas regando con su propio jugo o agrega agua si ves que han quedado muy secas.
- Sirve recién hechas con los jugos del asado.