El rambután es originario de Indonesia y es una de las frutas más exóticas que existen. Es un fruto pequeño, de forma ovalada y dulce, con una pulpa parecida a la de las uvas. Tiene un sabor fresco, jugoso y ácido.
Su aspecto exterior es peculiar porque está formado por una especie de pelos. Se pueden encontrar durante todo el año y se conservan perfectamente en la nevera dentro de bolsas plásticas por varios días. Si permanecen a temperatura ambiente y sin envasar, pueden secarse.
Para comer el rambután primera hay que quitar la parte exterior con un cuchillo y cortarlo por la mitad por la cáscara, sin atravesar la pulpa. Cuando ya esté cortado por la mitad, se aprieta ligeramente para que la pulpa salga. Antes de consumirla, se debe retirar la semilla que contiene ya que es venenosa.
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Propiedades y beneficios del rambután
- El rambután contiene ácido gálico y antioxidantes, por lo que ayuda a combatir el envejecimiento prematuro.
- Debido a su alto contenido de vitamina C, funciona para fortalecer el sistema inmunológico y combatir los virus.
- Este exótico fruto contiene calcio, hierro y fósforo por lo que será ideal para fortalecer los huesos. Y debido a su contenido en hierro, ayuda a transportar oxígeno de los pulmones a los tejidos.
- También contiene carbohidratos, agua y proteínas; esto ayuda a aumentar la energía.
- Además ayuda a la producción de glóbulos rojos y blancos porque contiene cobre y magnesio.
Es recomendable elegir el rambután de color rojo o amarillo ya que serán los que están maduros. De lo contrario, su color es verde.
El rambután tiene un alto contenido de azúcar y se puede comer de distintas formas, ya sea en mermeladas o en jaleas. También lo puedes comer en miel, hecha con el néctar de la fruta.