Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) «cada movimiento cuenta para mantener una vida saludable». Realizar algún tipo de actividad cardiovascular es importante para prevenir enfermedades cardíacos, diabéticos y cancerígenos.
Sin embargo, cuando el objetivo es combatir el sobrepeso y mejorar la estética corporal es importante preguntarnos si realmente es efectiva.
Antes de comenzar una actividad física es esencial consultarlo con un especialista, puesto que te ayudará a planificar los ejercicios necesarios para alcanzar tus metas.
Beneficios de las actividades cardiovasculares
Cada una de las actividades cardiovasculares traen beneficios para el organismo y, por supuesto, uno de ellos es la quema de grasa. Por tal razón, el cardio ha tomado la popularidad de ser el único método para perder peso.
Estudios han comprobado que aquellas personas que a diario realizan más de 5,000 pasos reducen el riesgo de complicaciones metabólicas como obesidad, hipertensión arterial y diabetes.
Dentro de los efectos positivos de las actividades cardiovasculares también se encuentran: mejorar la flexibilidad, fortalecer los huesos, potencializar la memoria y ganar coordinación.
Ver más: Rutina de 7 minutos para quemar grasa como nunca
Ahora bien: el cardio utiliza las reservas de grasa del cuerpo como combustible. Lo cual resulta muy positivo para el metabolismo y la pérdida de peso. Sin embargo, existe una respuesta adversa por parte del cuerpo y es su facilidad de adaptación.
Esto quiere decir que una rutina de 30 minutos no tendrá el mismo resultado con el paso de semanas y cada vez se debe prolongar más el tiempo de entrenamiento. En efecto, esta reacción del cuerpo puede afectar el proceso de quema de grasa.
¿Cómo se debe complementar el cardio?
Teniendo en cuenta lo anterior, es recomendable que no te apoyes solo en el cardio para perder peso. Lo ideal es que complementes con otros entrenamientos como los ejercicios de fuerza. De esta manera, tu objetivo de quemar grasas aumentará de manera progresiva y el organismo no tendrá un desequilibrio en huesos y músculos.
Cuando realizas actividades cardiovasculares, junto con ejercicios de fuerza, aumentas la masa muscular y, por consecuencia, tienes un mejor desempeño a nivel metabólico.
En conclusión, tanto la fuerza como el cardio son esenciales para cumplir tu meta de perder esos kilitos de más.