Un buen café puede cambiar el día de muchas personas, y es que percibir ese rico aroma que sale de la cafetera da un poco de tranquilidad.
Un dato curioso del café es que ese aroma que sale de la cafetera no es igual en todas partes; puesto a que no todos toman el café de la misma manera. Su intensidad puede variar en el sabor y el aroma y acá vamos a descubrirlo.
Cuando hablamos de la intensidad del café no solo nos referimos al sabor o el aroma, también debemos tener en cuenta el cuerpo o textura del mismo. La intensidad es proporcionada, ya sea por el nivel de acidez y del amargor del café.
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El café suele tener un intenso cuerpo y una textura casi espesa y sedosa a la misma vez, aunque la intensidad no determina la calidad.
Existen factores que pueden influir en lo que se refiere a las intensidades del café:
- El grano: Este determina gran parte de su sabor ya que es la base. Los granos de café robusta, por ejemplo, tienen un sabor más intenso y amargo que los de café arábica.
- El tueste: Existen varios grados de tostado y, dependiendo del grado en el que se encuentre el café tendrá un sabor más amargo o más dulce.
- La cafetera: No todas son iguales. No tendrá el mismo sabor un café preparado en una cafetera italiana, en una francesa o en una cafetera de goteo, a pesar de ser el mismo.
Hay quienes creen que la intensidad del café proviene de tener mucha más cafeína, pero no es así. La cantidad de cafeína en una café viene por el tipo de grano, el tueste y la forma de extracción.