El ciruelo es un árbol frutal delicioso que requiere de cuidados básicos para que produzca abundante cosecha. Esta plantación puede crecer hasta 14 metros de altura, dependiendo de la variedad de ciruela.
Existen tres tipos de ellos: el semienano que puede crecer solo hasta 2,2 metros. También está el ‘nuevo rizoma’ que tiene una altura de 2,5 metros y está la variedad más vigorosa con una medida mínima de 2,7 metros.
Todos requieren de cuidados esenciales, por lo que te recomendamos que sigas todos los consejos que te compartimos en este artículo para que puedas obtener frutos grandes y deliciosos.
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Cuidados básicos de un árbol de ciruelo
Para que puedas utilizar tus ciruelas en la cocina, es necesario que el árbol esté en buenas condiciones. Para esto, toma nota de los cuidados que debes practicar con la planta:
Ubica el ciruelo en un lugar adecuado
Es necesario que coloques la maceta con el ciruelo en un sitio donde reciba luz solar. Puedes situarla en la ventana o en tu jardín.
Riégalo con abundante agua
Si vives en un lugar cálido, riégalo constantemente ya que no le favorece la sequía. Asegúrate de que el sustrato no se seque demasiado, especialmente cuando se están formando los frutos.
Abona el ciruelo
Puedes hacerlo con un fertilizante granulado equilibrado y protégelo en el caso de temporadas de invierno. El abono orgánico o estiércol es ideal durante su primer y segundo año de vida y puedes aplicarlo en el mes de marzo.
Pódalo cuando sea necesario
Si ves que el árbol tiene algunas ramas secas y marchitas, retíralas con cuidado. Siempre procura que sus hojas estén fuertes y sanas. El ciruelo se debe podar por encima de los brotes que se encuentran sanos.
La poda en forma de florero es la mejor manera, ya que así obtienen más luz y aire.
Usos de la ciruela en la cocina
Al obtener la fruta de una manera tan práctica como tenerla en casa, te permite tener la facilidad de usarla en ricas y deliciosas preparaciones. Solo es cuestión de que pongas en práctica tu creatividad para comenzar a usarla. Aquí te damos algunas ideas:
- Puedes comerla en compota.
- Funciona para hacer mermelada.
- También puedes preparar deliciosas tartas.
- Disfruta de la fruta al natural y come la pulpa.
- En ensaladas de frutas
- Para hacer vinagretas y aderezos.