Un insecticida casero hecho de cáscaras de naranja te ayudará espantar a los caracoles que están en tu huerto. La naranja al igual que otras frutas cítricas es una buena opción para combatir a las plagas y también puede ser utilizado como un ambientador, ya que no es nocivo para los humanos y a las mascotas.
Además de repeler a esos moluscos, lo puedes utilizar para alejar a las babosas, larvas y cualquier insecto como el pulgón.
Te recomendamos que busques un lápiz y un cuaderno para que puedas anotar los ingredientes y las instrucciones para aplicar con éxito este truco de jardinería.
Te podría interesar: Usa café molido y ajo para ahuyentar a los caracoles de tu huerto
Guía para hacer un insecticida casero de cáscaras de naranja para alejar caracoles
Ingredientes
- 2 a 3 naranjas
- 500 ml de agua
- Atomizador
- Aceite esencial de naranja (opcional)
Primero pela las naranjas para que puedas tener las cáscaras, toma una olla y vierte los 500 mililitros de agua, acto seguido añades las cáscaras.
Enciende la hornilla y deja que hiervan las cáscaras durante 15 minutos. Luego, lo retiras y dejas reposar este líquido con las cáscaras de naranja durante 24 horas, después cuélalo y lo pasas al atomizador.
En el caso de que tengas aceite esencial de naranja, no necesitas usar las cáscaras, sino que añades una cucharada en un litro de agua. Al tratarse de un aceite, no se disolverá y será igual de efectivo como la mezcla que te explicamos.
¿Cómo usarlo?
Este insecticida casero de cáscaras de naranja actúa mejor por contacto, es decir, debes rociar este líquido encima de los insectos y moluscos. En el caso de que no los veas, puedes aplicarlo encima de las plantas y por debajo de las hojas, ya que muchas de estas plagas se suelen esconder.
Puedes aplicarlo una vez a la semana o cada cinco días. Ya que el exceso de este insecticida puede dañar la planta. En el caso de que llueva, puedes volverlo a rociar, ya que la lluvia se removería el líquido casero.
Ten en cuenta que en el momento que lo hagas, procura que no sea cuando la planta esté expuesta directamente al sol, ya que puede generar un efecto lupa y podría quemarla.