Algún familiar nos ha dicho que salir a caminar después de comer ayuda a despejar la mente y facilita la digestión. Y es así, han tenido razón.
Los científicos han descubierto que caminar por 15 minutos puede reducir los niveles de azúcar en la sangre, que a su vez evitará futuras complicaciones de la diabetes tipo II. Sin embargo, ahora con pocos minutos se pueden obtener estos beneficios.
La revista ‘Sports Medicine’ publicó un análisis, donde los investigadores revisaron los resultados de siete estudios y compararon los efectos de estar sentado, parado o de caminar para el corazón, además, incluyeron los niveles de insulina y azúcar en la sangre.
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Después de comer, puedes caminar dos minutos
En el estudio descubrieron que una caminata suave después de comer, en intervalos de tan solo dos a cinco minutos tuvo un impacto significativo en la regulación de los niveles de azúcar en la sangre.
En cinco de los siete análisis que se evaluaron, ninguno de los participantes tenía prediabetes o diabetes tipo II. Los trabajos restantes analizaron a personas que padecían o no esas patologías. Se les pidió a los voluntarios que se pusieran de pie o que caminaran de dos a cinco minutos con pausas cortas en el transcurso de un día entero.
De tal manera, demostraron que solo unos minutos de una caminata ligera luego de haber comido eran suficientes para mejorar los niveles de azúcar en la sangre, en comparación con aquellos que permanecen sentados.
Por otra parte, estar parado también ayudó a reducir los niveles de azúcar, aunque no tuvo la misma efectividad que una caminata corta. “Estar de pie tuvo un pequeño beneficio”, aseguró Aidan Buffey, un experto de la Universidad de Limerick en Irlanda y autor del artículo. En comparación con estar sentado o parado, “caminar con poca intensidad fue una intervención superior”, comentó.
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¿Cuál es la razón?
Esto se debe a que una breve caminata requiere de una participación activa de los músculos, que cuando estamos de pie. Además, el cuerpo utiliza los alimentos como combustible y en ese momento que están circulando por el torrente sanguíneo, “tus músculos absorberán parte de ese exceso de glucosa”, señaló Jessie Inchauspé, autora del libro ‘Revolución de la glucosa: el poder que cambia la vida al equilibrar su azúcar en la sangre’.