Las suculentas o plantas crasas son populares por su belleza y fácil cuidado, pero a veces esta especie resistente puede sufrir y pudrirse. Afortunadamente puedes revivir una suculenta siguiendo algunos pasos muy fáciles.
Para identificar si tu planta está sufriendo de algún daño, debes prestar atención a la apariencia de los tallos y hojas. Si tu suculenta tiene el tallo o las hojas marrones, zonas transparentes, hojas arrugadas o con mucha agua en el interior, podría indicar que está pudriéndose.
Si notas que cambian de color o lo pierden por completo, tienen puntos negros o el tallo está muy estirado, podría indicar una falta de luz, exceso de humedad o falta de nutrientes.
¿Cómo revivir una suculenta?
- Si quieres revivir una suculenta, lo primero que debes hacer es sacarla de la maceta y desechar el sustrato. Desinfecta el recipiente para eliminar cualquier rastro de hongos y corta la parte negra del tallo con un cuchillo previamente desinfectado.
- Para que sane la parte rescatada, colócala en una toalla de papel sin que reciba sol directo y deja que cicatrice el corte.
- Cuando el esqueje haya cicatrizado, ponlo en un sustrato especial para suculentas y cactus. Recuerda que la maceta debe estar desinfectada o nueva.
- Coloca tu suculenta en un lugar con buena iluminación sin sol directo. Riega con un atomizador hasta que el esqueje eche raíces; en este momento podrás regar de forma normal.
En caso de que el tallo esté bien y únicamente sean las hojas las afectadas, saca la suculenta de la maceta y retira todas las ramas marchitas. Trasplántala a un recipiente nuevo o desinfectado con sustrato para suculentas. Luego, llena la maceta a la mitad con sustrato, acomoda el tallo y cubre con tierra hasta la base del tallo. Es importante que no riegues hasta dos semanas después y hazlo con la ayuda de un atomizador.
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Consejos para evitar que tus suculentas se pudran
Para evitar que tus suculentas se vuelvan a pudrir, debes tener cuidado a la hora de regar evitando el exceso y cuidando que tenga un buen drenaje; tanto la maceta como el sustrato.
Un buen truco para identificar la necesidad de agua es verificar cómo está la tierra: cuando la sientas húmeda, evita regar y espera que esté seca para volver a echar agua.
Asimismo, asegúrate de que tus suculentas estén recibiendo la cantidad adecuada de luz. Este tipo de plantas necesitan mucha iluminación, pero no sol directo.
Si las hojas se están estirando hacia la luz, es una señal de que necesitan más iluminación. Pero si las hojas se están quemando, es una señal de que están recibiendo demasiada.
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