El maracuyá es una planta de origen tropical cuyo fruto tiene demasiadas propiedades nutritivas y medicinales. También es conocida como fruta de la pasión o granadilla. Es muy sencilla tenerla en casa, así que puedes aprender a cultivar maracuyá de forma fácil y práctica.
La pulpa de la fruta la puedes utilizar para batidos, postres y ‘smoothies’ para una alimentación balanceada porque tiene grandes cantidades de vitamina A y C.
De igual manera, se trata de una planta enredadera muy bonita para decorar la casa. Se estima que puede alcanzar hasta 9 metros de altura y, debido a sus numerosos zarcillos, se enreda en cualquier espaldera. Cuando crezca verás que es una planta muy atractiva cuyas hojas son de un verde brillante y sus flores muy coloridas y exóticas.
¿Cómo cultivar semillas de maracuyá?
Si estás motivada por cultivar maracuyá en tu casa, sigue al pie de la letra las siguientes instrucciones.
Utiliza las semillas frescas:
Lo ideal es que utilices las semillas de maracuyá recién cosechadas porque son las que más rápido germinan.
Prepara un vivero:
Siembra las enredaderas de maracuyá en una maceta separada y protegida.
Siembra las semillas:
Finalmente, ubica las semillas a 1 centímetro de separación entre cada una.
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¿Cómo cultivar maracuyá por esquejes?
Sí, existe esta segunda opción para cultivar maracuyá en tu casa. Toma nota:
Prepara un lecho de arena:
Empieza por llenar una maceta de plástico con una mezcla de ¾ partes de arena agrícola y ¼ de tierra de la superficie. Mezcla muy bien los componentes del suelo para que estén bien esparcidos por todo el recipiente.
Toma un esqueje:
Elige una planta de maracuyá bien madura y saludable para tomar un esqueje. Corta una parte de la enredadera que tenga mínimo 3 brotes y corta directamente debajo del brote más bajo.
Mantén el esqueje en condiciones húmedas:
El invernadero es el mejor lugar para el esqueje de una enredadera. No obstante, si no tienes en casa puedes construir tu propia cámara húmeda que extiende láminas de plástico transparente en una caja hecha de bambú.
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Cuidados que debes tomar en cuenta para el cultivo de maracuyá
- Mantén la planta en pleno sol y colócala donde el aire sea húmedo.
- Usa una manguera para hidratar suavemente las plántulas después de haberlas plantado. Es importante que verifiques que esté húmedo, pero no la ahogues con charcos porque puedes pudrir sus raíces.
- Cuando la planta esté creciendo de tamaño, aplica mantillo y fertilízala alrededor. Esparce algún abono orgánico hecho a partir de cáscaras de frutas, hojas y restos de legumbres.
- Todas las raíces necesitan acceder al abono y al mantillo. Lo ideal es que empujes suavemente un poco de la cubierta hacia la capa superior del suelo, luego de esparcir el abono y el mantillo alrededor de la base de la planta.
- Es crucial que apliques abono en la primavera y 1 vez cada 4 semanas durante la temporada de verano. También a mediados de otoño debe realizarse una alimentación con abonos orgánicos. Por ejemplo, las bolitas de estiércol de pollo de igual manera son una excelente opción.
