El bicarbonato y vinagre para las plantas es una mezcla maravillosa porque ataca de raíz los hongos, las malas hierbas y elimina los insectos. Estos tres escenarios serían un problema serio para el bienestar de tu matita de cuna de moisés o árbol frutal, por eso es imprescindible que siempre tengas en casa ambos ingredientes.
Además, debes saber que ambos actúan como repelente ante la presencia de hormigas, plagas y cualquiera que signifique una amenaza. Dicho esto, ¡no permitas daños en las hojas! Aplica a tiempo cualquiera de las mezclas que verás a continuación y mantén tu jardín hermoso.
También puedes leer: Reutiliza las cáscaras de limón con agua hervida para cuidar tus plantas de frutas
Bicarbonato y vinagre para las plantas: ¿Cómo lo aplico y para qué?
1. Elimina la plaga
La tarea es sencilla. Primero, debes limpiar e hidratar a tu matita como de costumbre. Posteriormente, esparce 1 cucharada de bicarbonato de sodio en la tierra del jardín (o en la maceta) ¡y eso es todo!
2. Trata los hongos
El bicarbonato y vinagre para las plantas favorece (y mucho), realiza la prueba y el resultado puede que te sorprenda. Acá, por ejemplo, requieres de muy poquito, debes usar 4 cucharadas del polvillo en las matas o árboles frutales y así será más fácil conservarlas.
Muchas veces, menos es más y esta es la prueba de ello. Con el pasar de las semanas notarás mejoría y sin necesidad de utilizar productos costosos o difíciles de conseguir.
También puedes leer: Abono de lentejas para árboles frutales y plantas en maceta
3. Evita que se enfermen
Por otra parte, si te preocupan las manchas oscuras en las hojas, pues hay una alternativa infalible que te ayudará a mantenerlas hermosas. Lo único que tienes que hacer es añadir 1 cucharada de bicarbonato en 1 litro de agua y batir enérgicamente hasta que estén fusionados.
Luego, en la superficie coloca la preparación con ayuda de un atomizador y evitarás parásitos.
4. Deshazte de las hojas débiles
También tienes la posibilidad de unir ½ taza de vinagre blanco con 1 cucharada del polvillo. Posteriormente, rocía sobre el huerto o directamente en las hojas y observa cómo se nutren por al menos 7 días.