Aunque la lavadora es una maravilla para limpiar la ropa, hay objetos que no puedes meter allí. De hecho, cometemos el error de creer que cualquier tipo de prenda u objeto puede lavarse en ese electrodoméstico.
Hay determinadas cosas que bajo ningún concepto deben ser introducidos allí, ya que puede perjudicar el funcionamiento de este artefacto. Por eso, te vamos a contar cuáles son y te vamos a proponer alternativas para limpiarlos.
Aprovecha en anotar estas recomendaciones para evitar dañar la ropa u objetos que tienes en tu casa.
Cinco objetos que no puedes meter en la lavadora
Almohada
Así como lo lees, aunque las almohadas son suaves, no las debemos introducir en la lavadora. Lo que va ocasionar que se deforme e incluso se rompa, también es poco probable que regrese su estado original. Te recomendamos que las laves a mano con agua temblada y jabón con pH neutro.
Cama del perro o del gato
En el caso de que tengas mascotas y quieras lavar su camita en la lavadora, descarta esa idea. El motivo es el siguiente: el pelo mojado de los perros o gatos se puede apelotonar y adherirse en el tambor y puede obstruir las tuberías del electrodoméstico.
Lo ideal es quitar con un rodillo de pelusas los pelos. Si todavía quedan, puedes introducirlo en la secadora, en el caso de que tengas, en un ciclo corto. Después, puedes lavarlo como lo indica la etiqueta de la cama.
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Ropa de encaje
La ropa de encaje es muy delicada y si en la lavadora llega a entrar en contacto con otras prendas que tengan cremalleras, botones o ganchos los puede rasgar. Para evitar un incidente, lo más recomendable es que laves esos atuendos a mano.
Revisa la etiqueta, en algunos casos propone hacer la limpieza en seco. Si ese es el caso, debes llevarla a la lavandería.
Prendas con manchas inflamables
Meter una prenda que se haya manchado con gasolina, aceite de cocina o de algún desengrasante en la lavadora es pésima idea. El alto calor del electrodoméstico podría hacer que se inciende e incluso provocar una explosión.
Por eso, te recomendamos que para tratar este tipo de manchas, usa un limpiador que contenga disolventes. Remójalo en un recipiente y déjalo reposar por unos minutos. Revisa si el olor de la mancha disminuyó para poder lavarlo en la lavadora. Eso sí: esto debe hacerse solo con la prenda, no lo mezcles con otros atuendos.
