Lo que fácil viene, fácil se va. Es una frase que por años nos han repetido, pero a veces no sabemos aplicarla. En especial, cuando buscamos perder peso. Pues bien, los nutricionistas han recalcado la importancia de implementar pequeños cambios en nuestros procesos alimenticios para adelgazar y que los resultados perduren en el tiempo.
Repasamos algunas recomendaciones para que logres algunos cambios en tus hábitos y pierdas esos kilos de más.
Pequeños cambios que debes implementar para adelgazar
1. Beber agua:
Tomar mínimo dos litros de agua te ayudará a eliminar toxinas a través de la orina y a darte una sensación de saciedad. El agua puede tener un gran impacto en lo que consumes a diario.
Recuerda siempre mantener un vaso o una botella de agua para que no te saltes este hábito. Poco a poco puedes ir aumentando su cantidad de ingesta.
2. No te saltes el desayuno:
Diversas investigaciones han determinado que saltarse el desayuno presenta un mayor riesgo a tener diabetes u obesidad. Implementar este cambio es importante para adelgazar y no muchos lo saben realizar porque, en ocasiones, los apuros no nos permiten tomar con calma esta comida.
Lo recomendable es entonces dejar las cosas preparadas la noche anterior para que no tengas excusa de saltarte el desayuno. Otra opción es cocinar todo desde el domingo.
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3. Consume grasas saludables:
Las grasas son fundamentales para la absorción de vitaminas y la regulación de las hormonas. Por lo tanto, debes consumir aguacate, salmón o frutos secos con mucha moderación. No olvides que las porciones de las grasas saludables son importantes porque tienen un alto aporte calórico.
4. Prioriza la fibra:
Los alimentos ricos en fibra como las frutas, las verduras, los cereales integrales, los legumbres y los frutos secos te pueden ayudar a perder peso a largo plazo. Cuando priorizas la ingesta de ellos, puede regular el tránsito intestinal y el buen funcionamiento del sistema digestivo.
Además, te da sensación de saciedad y te ayuda a desarrollar los músculos. Por lo tanto, acelera tu metabolismo.
5. Reduce el consumo de alcohol:
Especialistas han resaltado la alta cantidad de calorías y los bajos aportes de nutrientes del alcohol. Por lo tanto, la recomendación siempre es beber con mucha moderación. Una opción puede ser tomar alcohol en ocasiones muy específicas, cuando un evento social lo amerite.
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6. No mires pantallas mientras comas:
A diario, mantenemos a nuestro alrededor estímulos tecnológicos como el celular, el televisor o el computador. Lo ideal es que cuando comas estés concentrada en lo que consumes. Esto te ayudará a ser consciente de lo que estás ingiriendo y sus cantidades. Además, podrás escuchar con facilidad a tu cuerpo una vez te sientas llena.
7. Llevar el registro de las comidas:
Si deseas comenzar una vida mucho más saludable, puedes llevar un diario sobre lo que comes. De esta forma, puedes evaluar qué estás consumiendo en el día y qué aspectos debes mejorar.
Por ejemplo, si evalúas que a diario consumes 3 latas de gaseosa, puedes identificar más fácilmente los errores. En esta caso, la recomendación es que no inicies eliminando por completo la gaseosas sino que sea una reducción gradual a la semana.
8. Mantén una vida activa:
No es necesario que te excedas en horas de ejercicio. Simplemente, incorpora el hábito de la actividad física en tus rutinas diarias. Por ejemplo, utiliza las escaleras en vez del ascensor. O si vives cerca a tu puesto de trabajo, puedes desplazarte caminando o en bicicleta.
En general, es importante que seas paciente con el proceso. No esperes cambios radicales, sino pequeños hábitos que puedas implementar de manera progresiva. Estos cambios seguro son efectivos para adelgazar y cada día te ayudarán a mantener un estilo de vida saludable.