¿Alguna vez has probado el té de cáscara de mandarina? Esta bebida natural ayuda a relajarte y concentra varios nutrientes gracias a la piel de la fruta. Así que, si no eres alérgico a los cítricos, úsala a tu favor para conseguir ese efecto tranquilizador que tanto te hace falta.
Este es el tipo de infusiones que puedes consumir en una tarde lluviosa o cuando cae la noche, sobre todo si estás buscando dormirte rápido.
El té de cáscara de mandarina está cargado de vitamina C, calcio, fibra y agua. No dudes en consumirlo si debes apoyarte de las frutas para obtener una mejor alimentación. Por lo general, muchos consumen la pulpa, pero olvidan que la piel también forma parte del contenido y aporta interesantes propiedades.
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Razones para preparar el té de cáscara de mandarina
– Tiene una función relajante.
– Además, favorece tu digestión.
– Es una bebida aromática, saludable y agradable pensada para tomar en cualquier momento del día.
– Si lo deseas, añade la pulpa de 1 o 2 mandarinas sin semillas cuando hiervas todo en la olla.
– Puedes agregarle canela, jengibre o jugo de ½ limón para lograr un sabor aún más delicioso en el té de cáscara de mandarina.
– No necesitas endulzarlo, a menos que lo sientas necesario.
Un aliado de la dieta
¿Te cuesta dejar de comer en horas indebidas? Tal vez, este tipo de infusiones te ayuden a controlar la ansiedad, más que los snacks sanos. Por 1 semana realiza la prueba, toma 1 taza de té de cáscara de mandarina cuando te alcancen las ganas de picar constantemente. Posiblemente, obtengas un rápido efecto de llenura en el estómago debido a su contenido de agua.
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Té de cáscara de mandarina y canela
Ingredientes
- 2 tazas de agua
- Cáscara de 1 mandarina
- Pulpa de 1 mandarina sin semillas
- 1 cucharadita de canela en polvo
- 2 cm de raíz de jengibre (opcional)
- Miel o stevia para endulzar (opcional)
Instrucciones
En la licuadora mezcla la pulpa sin semillas con 1 cm de jengibre.
Posteriormente, hierve el agua, y cuando alcance el punto máximo de ebullición agrega la cáscara de mandarina.
Déjala hervir por 5 minutos a fuego bajo, apaga las llamas, vierte la pulpa preparada con jengibre, añade canela y revuelve.
Aparta el té de cáscara de mandarina del calor, espera que se repose durante 5 minutos, y endulza con miel o stevia (si lo crees necesario).