La chía es una semilla que puedes incluir como complemento de muchas comidas y que contiene múltiples propiedades beneficiosas para el organismo.
No sólo su sabor y consistencia son útiles para las recetas, además, una de las ventajas es que resulta una semilla que no altera el sabor de los alimentos, ya sean salados o dulces.
Gracias a su suavidad y sabor agradable, los usos de la chía son variados y te sorprenderás en la cantidad de preparaciones en las que puedes usarla: en aderezos, jugos y postres.
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Propiedades de la chía
Con el pasar del tiempo, la chía se ha vuelto el complemento favorito de muchos a la hora de preparar recetas y desayunos nutritivos debido a sus variadas propiedades importantes para la salud.
Entre ellas, podemos mencionar que la semilla de chía es una fuente de calcio; un mineral importante para el mantenimiento de los huesos. Además, es libre de glúten.
También contiene omega 3, un ácido graso que puede tener beneficios cardiovasculares. Además, puede ayudar a la correcta función cerebral y cognitiva.
Asimismo, la chía es una fuente enriquecedora de vitaminas del complejo B, las cuales pueden favorecer al crecimiento y desarrollo de las células.
La semilla contiene antioxidantes y proteína que pueden ayudar a mejorar el sistema inmunológico. Así que no dudes en incluirla en tus platillos, postres o batidos. Recuerda que si tienes dudas sobre su consumo, puedes consultar a un especialista.
¿Cómo puedes consumir la chía?
Como lo mencionamos, la chía no altera el sabor de los alimentos así que puedes ingerirla de muchas formas:
- Prepárala en agua: agrega una cucharada de la semilla a media taza de agua fría. Revuelve durante unos segundos y deja reposar por 30 minutos antes de tomarla. La ventaja de hidratarlas con algún líquido, es que de esta manera sueltan enzimas que son buenas para el cuerpo.
- Puedes agregarlas directamente en zumos de frutas o smoothies.
- Consúmela como aderezo, espolvoreando una cucharadita sobre frutas o ensaladas.
- También puedes comerla como complemento, solo agrega una cucharadita de chía en tu avena, yogurt o cereal y disfruta de su textura crujiente. Además, puedes añadir las semillas molidas a un delicioso licuado con avena y leche.
- Y si quieres hacer un postre saludable para la merienda, una excelente opción es el pudín de chía y avena.
